viernes, 27 de julio de 2007

Invocacion



al tocar la madrugada

con tus rezos

me levantas en veintiùn alba.

esta religion tan tuya

la de recoger los pantalones , los paños

humedos

y muchas ganas

horizontales y oblicuas
serè fuerte lo suficiente fuerte

para recibir

una lluvia

de alfires en mis ojos.

Para aceptar que no soy mujer

porque no puedo

cuando quiero

saber lo que busco.

2 comentarios:

Gonzalo Del Rosario dijo...

Oe este poema está hermoso.

Me encantan las imágenes:

"Al tocar la madrugada con tus rezos" (...)

"recibir
una lluvia
de alfires en mis ojos"

Todos los humanos somos un saco de dudas.

Ricardo Calderón Inca dijo...

Tan sólo imaginarme:
"recibir
una lluvia
de alfires en mis ojos"
me da cosas amiga...provocas en mí situaciones desesperantes!!!